La negociación colectiva, últimamente, se mueve en un marco de retrocesos de conquistas laborales y de una total renuncia a la movilización. El abandono de la acción sindical, unida a la aceptación por parte de las cúpulas sindicales de las propuestas del capital, nos esta llevando a un continuo retroceso en nuestras condiciones de trabajo y con ello de vida.
 Ni uno solo de los derechos, que hasta hace unos años disfrutábamos y que paulatinamente hemos ido cediendo,  fue conquistado sin grandes sacrificios. El capital no regala nada. Por eso, desde la Sección Sindical de CGT, consideramos que la organización, la movilización y la participación son elementos claves para el fortalecimiento de un sindicalismo, realmente, de clase.
El 31 de enero de 2008 se da el pistoletazo de salida a la negociación del convenio colectivo, en la planta que PSA Peugeot-Citroà«n, tiene en Vigo.
Los días previos al inicio de las negociaciones, todas las centrales sindicales con representación en el Comité de Empresa, inundaron la fábrica de anteproyectos.
Si una pedía una subida  salarial de un 2%, otra un 4%; si una pedía 1000 contratos, otra 1200; cada central prometía luchar por mas dinero, mas empleo, menos trabajo y mejores condiciones sociales. Eso si cada una por su lado.
En esta empresa desde hace años el Comité de Empresa, que es el órgano colegiado para la negociación, haciendo dejación de sus funciones ha cedido su papel a las centrales sindicales.
La Sección Sindical de CGT, desde el principio se planteo la necesidad de recuperar la unidad de acción de todas las centrales sindicales de clase, si queríamos parar el retroceso que convenio tras convenio estamos sufriendo en nuestras condiciones de trabajo.
Al no tener representación en el Comité, nuestra capacidad de incidir en lo negociado era poca, pero si podíamos tratar de recuperar la negociación para el colectivo. Actuando como revulsivo de una situación insostenible, que permite que el futuro de unos 10 mil trabajadores sea decidido, en el mejor de los casos, por unos cientos.
De ahí que toda la campaña desarrollada durante la negociación, estuviese encaminada a lograr un convenio transparente, participativo y solidario.
Nuestra primera medida para "obligar" a las centrales sindicales de clase a contar con todo el colectivo, y no tan solo con sus afiliados. Fue una campaña de recogida de firmas entre toda la plantilla para exigir asambleas conjuntas y participativas, durante la negociación y antes de la firma de cualquier acuerdo.
Ante el silencio de las centrales sindicales y respaldados por casi 200 firmas, la sección sindical de la CGT decidió convocar una asamblea abierta a todos los trabajadores.
En dicha asamblea se vio la necesidad de recuperar la acción sindical si queríamos parar esta nueva agresión. Se acordo la realización de concentraciones a la salida de los turnos, en el interior de la fábrica, bajo el lema "No a este convenio". A pesar de invitar por escrito a las centrales sindicales de clase presentes en la negociación, a unirse a las concentraciones, todas ellas declinaron la oferta. Lo cual no impidió que afiliados a dichas secciones se sumaran a las concentraciones.
 Una vez mas la desunión, la falta de acción sindical y "lograr un trozo del pastel"; ha traído como consecuencia la firma de un convenio regresivo, por la mayoría del Comité.
Tan solo la Sección Sindical de la CIG no ha firmado, ahora esperamos que no lo asuma, como ya hicieron otros en el 2001, y que se una a la Sección Sindical de CGT en la lucha contra la aplicación de este Convenio.
 Desde la Sección Sindical de CGT valoramos positivamente la campaña realizada durante la negociación. Aunque no logramos parar el retroceso, logramos despertar algunas conciencias. Se cometieron errores, y la respuesta de los trabajadores no fue del todo la esperada, pero estamos contentos porque por lo menos demostramos que hay otra forma de hacer las cosas. Contando con tod@s, para lograr un convenio de tod@s y para tod@s.
El Convenio firmado por el Comité, es un Convenio que continúa la línea marcada por los anteriores, aumento imparable de la flexibilidad y reducción de costes.
 Este es un Convenio malo para los que ya estamos, pero es aun peor para los que vengan detrás. La única beneficiada es la empresa.
• Modifica el actual sistema de categorías, pasando de 10 categorías a catorce niveles. Un sistema que esconde una mayor escala salarial, y lo que es mas grave, un salario de entrada para los eventuales. A través del nivel 1 los eventuales van a ver reducido su salario en 1800 euros al año.
• A pesar de que la eventualidad en este momento supera el 42%, no se le pone límite. El acuerdo ofrece 300 contratos si el porcentaje de eventualidad esta por encima del 20%, pero si llega al 50%, el numero de contratos será el mismo.  En el anterior Convenio cambiamos 2000 empleos de ocho horas por 1000 de cuatro, y las previsiones hablan de una perdida de empleo fijo neto al final del actual convenio 2008-2011.
• Recoge una subida salarial de 120 euros el primer año, mas un punto por encima del IPC previsto; y medio punto por encima del IPC previsto el resto de los años. Que mucho nos tememos que teniendo en cuenta la diferencia existente los últimos años entre las previsiones del Gobierno y la subida real, esta mísera subida será absorbida por el IPC. Subida mínima, sobre todo si la comparamos con el 500% que subieron los beneficios del grupo el año pasado.
• Hasta ahora el turno de noche podía trabajar "sábados no laborales según el Calendario Laboral general, Domingos o festivos", pues no contentos con esto a raíz de la firma del Convenio, ahora podrán ver aumentada su jornada diaria hasta 15 minutos, con la unica condición de avisarles antes del ultimo descanso.
• Mantienen el actual acuerdo de bolsa de horas, de 20 días.
• Aunque no esta recogido en el texto del convenio, la reducción de 10 minutos del tiempo de bocadillo, si existe la "obligación" de la empresa y los representantes de los trabajadores de "acometer el problema para dotarse de ese mecanismo que nos hace falta". A partir de su aplicación los trabajadores veríamos reducida nuestra jornada de presencia en diez minutos, tiempo que hasta ese momento era de bocadillo. Seguiríamos disponiendo de 15 minutos para comer el bocadillo, pero serian 5 minutos de bocadillo y 10 minutos, de los descansos actuales, que se unirían a estos cinco.
• En cuanto a política social, apenas se cumple la ley, en temas como igualdad o conciliación. De hecho la gran apuesta de este convenio en el tema de conciliación es la contratación del Grupo Alares. Grupo famoso, entre otras cosas, por su director. Fundador de una de las primeras y mayores ETT´s del Estado, Human Group.

Secretaria de Acción Sindical de CGT en PSA Peugeot-Citroà«n, Vigo. cgtpsavigo@hotmail.com

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