La CGT de Pontevedra convoca una concentración ante las oficinas del Grupo Citibank en Pontevedra (cruce de la calle Riestra con Gutiérrez Mellado) el martes, día 18 de mayo, a las 12:00h, en protesta por la amenaza de traslado forzoso a una compañera de CGT. Raquel Olmos se niega a renunciar a su puesto de trabajo y, como militante de CGT, viene denunciando el pacto firmado por CCOO y UGT con la empresa en 2008 para reducir la plantilla. A continuación el texto que se repartirá públicamente durante la concentración.
CITIFIN PISOTEA LOS DERECHOS LABORALES
LA CODICIA DE CITIFIN AUMENTA EL PARO
Cada día que pasa las grandes empresas, gracias a la complicidad del gobierno y las burocracias del sindicalismo oficial, atentan contra los derechos más elementales de los trabajadores, en especial contra aquellos que no toleran actos de injusticia o abuso y que, organizados sindicalmente, defienden su puesto de trabajo y condiciones laborales dignas. Tal es el caso de CITIFIN SA (Citifinancial) contra Raquel Olmos Enríquez y contra la CGT.
En julio de 2008, la Dirección de la Empresa y las Secciones Sindicales de CCOO y UGT suscribieron un Acuerdo para reducir plantilla en la empresa con la excusa de eliminar determinadas áreas de su actividad. A tal fin, arbitraron medidas de recolocaciones, prejubilaciones y bajas incentivadas, al tiempo que se excluía expresamente cualquier traslado forzoso como medida válida para cubrir una vacante. La CGT se negó a firmar dicho Acuerdo pues no podía admitir la reducción de plantillas sin otra justificación que la arbitraria decisión de la Dirección.
Raquel Olmos, trabajadora de CITIFIN en Pontevedra, militante de CGT, quedó embarazada en mayo de 2009. El 12 de diciembre de ese año la empresa le comunica, mediante burofax, que debe trasladarse forzosamente a A Coruña, justificando el hecho en el previsible cierre de la oficina de Pontevedra. Pretendía, de este modo, la empresa aplicar el acuerdo de bajas incentivadas, ignorando la cláusula de exclusión del traslado forzoso y, sobre todo, la circunstancia de estar la trabajadora embarazada. Estos hechos demuestran que el verdadero motivo del traslado no era otra cosa que la militancia de Raquel en la CGT, sindicato que rechaza el Acuerdo. Había que "dar un ejemplo" para toda la plantilla, máxime cuando la misma empresa reconoce la existencia de trabajo en Vigo. CITIFIN represalia a quien no se somete voluntariamente a sus arbitrarias decisiones.
La decisión empresarial de movilidad geográfica a Raquel, es un engaño y una actuación fraudulenta de la empresa para con las mujeres embarazadas, a las que de esa manera coacciona para que se acojan a bajas incentivadas. Por negarse a esta baja es por lo que se la manda a A Coruña, represaliada. CITIFIN impide la conciliación de la vida familiar con la vida laboral.
Exigimos a CITIFIN la anulación de este traslado forzoso y el respeto a los derechos de esta compañera y de todas y todos los demás trabajadores que se niegan a perder un puesto de trabajo.
¡CONTRA EL PARO!
¡CONTRA LA CODICIA EMPRESARIAL!